En el Centro de salud Integral del Hombre y la Mujer (CSIHM), estamos preocupados por la salud de nuestros pacientes, queremos crear consciencia sobre la prevención en cuanto a la salud sexual y reproductiva del hombre. Por ello, recomendamos asistir periódicamente con un especialista en andrología para llevar un seguimiento de tu salud, detectar infecciones a tiempo y asegurarnos que mantengas tu calidad de vida.
Asistir periódicamente a una revisión médica con un andrólogo es necesario para tu salud sexual, ya que si lo dejas pasar, una infección mal tratada en las vías urinarias u órganos reproductivos pueden ser capaces de afectar tu vida sexual, así como ocasionar infertilidad masculina o una reducción en la fertilidad. Lo anterior, puede suceder por diversas causas:
- Si una infección afecta a los testículos, puede ser capaz de imposibilitar la formación de espermatozoides causando oligozoospermia (el semen tiene poca concentración de espermatozoides), o azoospermia secretora (la ausencia de espermatozoides en el semen). Este tipo de azoospermia es más severa, porque los hombres no producen espermatozoides en los testículos y esto puede ser por problemas en los testículos, debido a niveles hormonales o desde el nacimiento.
- Otros tipos de infecciones pueden afectar la obstrucción de vías seminales y, del mismo modo, pueden provocar oligozoospermia o azoospermia obstructiva. Cabe mencionar que la diferencia entre la azoospermia obstructiva y la secretora, es que en la obstructiva los hombres si producen espermatozoides en los testículos; sin embargo, estos no alcanzan a salir de manera normal, debido a la obstrucción (en la secretora no se producen espermatozoides).
- Las infecciones por microorganismos pueden adherirse a los espermatozoides por lo que su movilidad puede verse afectada y, por lo tanto, no pueden desplazarse hasta el óvulo. Asimismo, puede afectar la forma de los espermatozoides; esto se debe a que los espermas tardan entre dos y dos meses y medio en su formación y, si existe una infección que afecte su formación, puede ocasionar que sean incapaces de trasladarse hasta el óvulo.
- Las infecciones también pueden causar fragmentación del ADN (en la cabeza del espermatozoide), y sufren cortes que provoquen que se vea afectado el llegar al óvulo y fecundarlo. Además, las infecciones pueden crear anticuerpos que se van a adherir a los espermatozoides, impidiendo su movilidad, por lo que, no pueden llegar hasta el óvulo y fecundarlo.
- Por otro lado, estas infecciones seminales pueden ser contagiosas y, por medio del semen, pueden afectar a la mujer y a su fertilidad. Si es que tienes o sospechas que tienes alguna infección en las vías urinarias, próstata, epidídimo o testículos, te recomendamos evitar las relaciones sexuales hasta determinar qué es lo que tienes, se trate y elimine la infección.
Existen diversos tratamientos contra las infecciones seminales, algunas de ellas, pueden tratarse fácilmente con antibióticos y anti inflamatorios. En caso de no esperar el tiempo determinado y tomar los medicamentos recetados por tu médico, puede haber complicaciones y requerir de una intervención quirúrgica para reparar el daño y que no existan problemas permanentes en la fertilidad masculina.
Si estás buscando tener un hijo y consideras que sufres de infertilidad masculina; es necesario descartar que exista alguna infección que sea la responsable. Después del tratamiento, es posible que los niveles de movilidad y cantidad de espermatozoides vuelvan a la normalidad y puedan llevar a cabo una concepción exitosa, sin necesidad de la reproducción asistida.
En el caso de que, aún después del tratamiento persista la infertilidad masculina, se pueden emplear diversas técnicas de reproducción asistida que podrán lograr la fertilización del óvulo, como lo son la fecundación in vitro o la micro inyección espermática, también conocida como ICSI.
En la fecundación in vitro se toma una muestra de los espermatozoides del hombre, se analizan y se separan los espermas que tengan anomalías. De esta manera, se eligen únicamente los espermatozoides que estén saludables. A la mujer se le extraen óvulos y, posteriormente, en el laboratorio se dejan para que los espermatozoides fecunden al óvulo. Este tipo de técnica necesitan de millones de espermatozoides para que pueda funcionar. Se dejan reposar durante la noche y, al día siguiente, se puede notificar si hubo fecundación. Si existió fecundación, días después, se implantan los óvulos fecundados a la mujer en el útero, para que el embrión comience su desarrollo.
La diferencia entre la fecundación in vitro y la micro inyección espermática, es que en esta última solamente se requiere un espermatozoide para que pueda existir la fecundación. Esta segunda opción, normalmente, se utiliza cuando el caso de infertilidad masculina es más severo. Este tratamiento consiste en separar los espermatozoides y elegir a los que tengan mejor calidad. Posteriormente, se toma el óvulo y se le desprende su capa protectora y se inyecta un solo espermatozoide al óvulo. De esta manera, aseguramos la fecundación del óvulo con un solo esperma (no se requieren millones como en la técnica in vitro). Al igual que en la técnica in vitro, se deben esperar unos días y, posteriormente, se implantará el pre embrión en el útero de la mujer para que continúe con su desarrollo.
La principal ventaja de utilizar la micro inyección es que esta técnica, es de las que mayores tasas de éxito tiene y, en muchas ocasiones, se logra el embarazo en el primer intento. Si han tenido problemas para concebir desde hace un año o más, no pierdan la esperanza, ya que debido a los nuevos avances tecnológicos y a las técnicas de reproducción asistida, es posible concebir un bebé.
Debido a infecciones, problemas hormonales o psicológicos, los hombres pueden presentar infertilidad masculina o alguna reducción es su fertilidad que ocasione que aún no hayan tenido éxito en concebir un hijo. Por estas razones, es importante asistir con especialistas en fertilidad, en andrología (hombre) y ginecología (mujer), para que evalúen a la pareja y que después de los análisis, se puedan descartar problemáticas y llevar un seguimiento de su salud sexual y reproductiva durante toda su vida.