¿Qué es el semen?

El semen es un líquido de color blanco que se expulsa desde la uretra en el momento de la eyaculación. El semen es una mezcla de secreciones que provienen de la próstata, vesículas seminales y de los testículos que es el lugar donde se producen los espermatozoides.

Las principales sustancias que contiene son ácido cítrico y fructosa, y cada centímetro cúbico del semen tiene millones de espermatozoides, cuyo único objetivo es la inseminación, debido a que su función es transportar los espermas al tracto reproductor femenino.

¿Cómo se producen los espermatozoides?

Los espermatozoides se desarrollan en los testículos por medio del proceso de la espermatogénesis. Este es un proceso continuo que inicia en el testículo y comienza a suceder a partir de los once a los quince años y tiene tres fases.

Durante la primera fase, se duplican las células germinales, lo que darán lugar a 16 espermatocitos primarios que contienen 46 cromosomas (23 paterno y 23 materno); posteriormente, comienzan una segunda división.

Esta segunda división, es la segunda fase para la producción de espermas que dará lugar a un espermatocito secundario, los cuales, contienen 23 cromosomas. Posteriormente, se produce la espermatogénesis y durante esta fase, se completa el desarrollo de los espermatozoides, reduciendo el tamaño de la célula, eliminando gran parte del citoplasma y desarrollando una cola; la cual, permite el movimiento y mejora la capacidad para penetrar y lograr la inseminación del óvulo. Además, los espermatozoides contienen mitocondrias, las cuales, son las que le proporciona energía para moverse. Finalmente, las glándulas bulbouretrales y uretral sirven para lubricar el tracto reproductor masculino.

Cuando los espermatozoides salen de los testículos se mezclan con líquidos producidos en las vesículas seminales que contribuyen, junto con la fructosa, como alimento para los espermatozoides, provocando que el semen sea gelatinoso, lo que puede ayudar para que éste se mantenga en el cuello del útero de la mujer. Por otro lado, las secreciones de la próstata contienen varios componentes, entre las que destaca una enzima que funciona para licuar el semen coagulado, permitiendo que los espermas puedan moverse y realizar la inseminación del óvulo exitosamente.

Para la inseminación del óvulo, es necesario contar con un buen nivel de espermas. Sin embargo, en muchas ocasiones, no consideramos qué aspectos de la vida diaria pudieran estar afectando a la producción de espermas. Si llevas un año o más intentando tener hijo y no ha dado resultados, puede que sea momento de realizarse un conteo de espermas, para así averiguar cuál es la cantidad y calidad de los espermas y descartar cualquier problema que pudiera existir.

Sugerencias para aumentar la cantidad y calidad de espermas

Normalmente, el bajo conteo de espermatozoides en el semen puede deberse a llevar una vida con malos hábitos, puedes comenzar con 30 minutos diarios de ejercicio y procurar mejorar tu dieta diaria. Sugerimos aumentar la ingesta de proteínas, reducir grasas y alimentos fritos, así como consumir frutas y verduras. Se recomienda evitar el clembuterol o dietiletilbestrol (normalmente se encuentran en la carne de res), así como evitar dietas drásticas para bajar de peso o el uso de esteroides anabolizantes.

Además, sugerimos reducir el consumo de alcohol, tabaco y otras drogas, porque pueden afectar la cantidad y calidad del esperma. Asimismo, evitar estar expuesto a contaminantes tóxicos como plomo, cadmio, pesticidas y herbicidas, entre otros.
Los testículos siempre deben mantener una temperatura inferior a la del resto del cuerpo, por lo que la ropa interior es de suma importancia, procura utilizar ropa interior que no sea muy ajustada y que no caliente demasiado tus testículos, pues esto afecta, directamente, a la producción del semen.

El estrés puede causar grandes daños psicológicos y cambios hormonales en tu cuerpo. Si tu y tu pareja están obsesionados con el tema de la paternidad, puede aumentar la presión en ambos, por lo que sugerimos tratar de controlar el estrés en este tema, asistiendo con un médico que pueda orientarlos o solucionar algunas dudas. Si ya asistieron con su médico, pueden canalizar el estrés realizando ejercicio, mismo que ayuda a disminuirlo, mejora la circulación de cuerpo, así como la calidad y cantidad de los espermas.

Por otro lado, es importante señalar que las infecciones de transmisión sexual pueden disminuir la calidad y cantidad del semen, debido a que producen infecciones seminales que pueden bloquear el paso de los espermatozoides produciendo poco o nulo conteo. Finalmente, si estás tomando fármacos o un tratamiento como radiación o quimioterapia también es un factor que influye negativamente a la calidad del semen.

Estas son algunas de las razones por las que el conteo y la calidad del semen pudieran verse afectados. Sin embargo, siempre es recomendable asistir con su médico para una evaluación completa, donde se podrá descartar si existe algo mal o qué tipo de tratamiento se necesita llevar para aumentar el conteo de espermas, así como su calidad.

En el Centro de Salud Integral para el Hombre y la Mujer (CSIHM), realizamos estudios de fertilidad, diagnosticamos y ofrecemos la mejor solución para que la pareja pueda cumplir su sueño de ser padres. Algunos de los métodos de reproducción asistida más comunes son la inseminación artificial y la inseminación in vitro. Cada una lleva un proceso diferente. Sin embargo, en el caso del hombre, normalmente, se realizará un estudio no invasivo y se pedirá una muestra de semen para poder inseminar al óvulo.

Si tienes más dudas o inquietudes sobre el tema, solicita una cita al teléfono 41652834 en un horario de las 8:00 a las 20:00 horas de lunes a viernes y los sábados en un horario de las 9:00 a las 17:00 horas. Estaremos muy contentos de poder atenderle.

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