La infertilidad femenina es un problema que agobia a miles de mujeres en todo el mundo y puede venir dada por diversos factores. Cuando no se logra un embarazo después de un año de haber mantenido relaciones sexuales sin protección, los médicos aconsejan llevar a cabo estudios, tanto en la mujer como en el hombre, para determinar el origen del problema; pero, aunque hay muchas causas patológicas que se atribuyen a las dificultades para concebir, hay ciertos motivos que pueden hacer parte de un diagnóstico y que ustedes mismas pueden trabajar, a fin de convertirse en madres.
- Mala alimentación. Consumir grasas trans con excesiva frecuencia puede ser determinante para la fertilidad. Productos horneados o procesados industrialmente, como la bollería, las pizzas, las papas fritas y las hamburguesas pueden afectar la salud reproductiva, ocasionando que la ovulación se retrase o no se produzca. Es por ello que los expertos de nuestra clínica de fertilidad recomiendan que limiten el consumo de estos alimentos, sustituyéndolos por alternativas más sanas, como el aguacate, la avena, el pan de centeno integral, los plátanos y el yogur.
- Poco o mucho ejercicio. Tanto si hacen ejercicio en exceso, como si no practican deportes y llevan una vida sedentaria, están en riesgo de sufrir problemas de fertilidad. Hacer ejercicios, salir a caminar o inscribirse en un gimnasio puede mejorar la fertilidad hasta cierto punto, y es un hábito que repercute en la salud general, evitando la aparición de cardiopatías, diabetes y cáncer.
- Bajo índice de masa corporal. Tener un índice de masa corporal (IMC) por debajo de lo normal puede llegar a disminuir las posibilidades de concebir. Si ustedes han estado intentando lograr un embarazo con sus parejas, pero sin éxito, y tienen un peso muy bajo, es posible que se deba a esto. Un IMC bajo trae como consecuencia disfunción ovárica, infertilidad y nacimientos prematuros. Para lograr un peso sano, lo más recomendable es que consulten con un especialista.
- Exceso de estrés. Los problemas laborales, las presiones cotidianas y el deseo exacerbado de ser madres puede jugarles una mala pasada. Investigaciones recientes han determinado que, tanto la fertilidad femenina como la masculina, puede verse afectada por el estrés, así que traten de relajarse, tómense con calma el proceso y disfruten de su sexualidad sin presiones y de manera responsable.
Ustedes no están solas. Sabemos que un diagnóstico de infertilidad puede resultar devastador, pero la buena noticia es que nuestra clínica de fertilidad en el DF pone a su disposición una gama amplia de tratamientos de vanguardia para que logren ese anhelado sueño. Si necesitan asesoría, ingresen en nuestro sitio web y soliciten una consulta con nuestros especialistas a través de nuestros medios de contacto.