En la actualidad, la inseminación in vitro es una de las técnicas más empleadas para lograr que las parejas infértiles logren el tan ansiado sueño de convertirse en padres. Consiste en la unión del óvulo con el espermatozoide en el laboratorio, a fin de obtener embriones ya fecundados, que luego serán transferidos al útero a través de un catéter, donde se espera que se implanten para su desarrollo.

Son muchas las pacientes que se preguntan qué molestias sentirán, si será un procedimiento doloroso y qué pueden esperar del tratamiento. Es común que experimenten cierto grado de inquietud o miedo, frente a un tratamiento en el que han depositado sus esperanzas y que les resulta desconocido; por lo tanto, es importante que se informen correctamente, acudiendo con nuestros profesionales y leyendo este post, en el que les compartimos información de utilidad.

Estimulación ovárica

La primera fase del tratamiento de fertilización in vitro consiste en administrar una medicación que incide en el proceso de ovulación, lo que hace que se produzcan más ovocitos, con la finalidad de obtener un mayor número de embriones y, por ende, aumentan las posibilidades de lograr un embarazo. El tratamiento es administrado por la mujer, en casa, y mediante unas inyecciones subcutáneas con agujas finas, para luego proceder con un seguimiento ecográfico en el que se comprueba la maduración folicular.

Punción folicular

Consiste en extraer los óvulos que serán fecundados. Nuestros profesionales les practicarán una ecografía vaginal y, usando una aguja, se pincha el ovario y se extraen los óvulos. Este procedimiento puede ser doloroso, lo que significa que, en la mayoría de los casos, puede ser necesaria la aplicación de anestesia general. La duración de la intervención es de solo 15 minutos y es de carácter ambulatorio, por lo que no será necesaria la hospitalización.

Fecundación de los óvulos

Una vez que hayan sido recolectadas las muestras, tanto de óvulos como de espermatozoides, nuestros expertos procederán a realizar la fecundación en laboratorio, que puede ser mediante el proceso convencional de fertilización in vitro, la cual consiste en colocar en una cápsula de Petri un óvulo rodeado de espermatozoides; o mediante la técnica de ICSI, en la que se inyecta el espermatozoide al óvulo.

Transferencia embrionaria

Cuando la concepción se ha dado y los embriones están listos, los profesionales de nuestra clínica de fertilidad programarán una cita para proceder con la transferencia, que se lleva a cabo dentro del útero materno, usando un espéculo y una cánula muy fina.

Para solicitar más información acerca de la inseminación in vitro, comuníquense con nosotros a través de nuestro sitio web o llamando a los teléfonos: +52 (55) 4165 2834 – +52 (55) 4165 2833.

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